La construcción sostenible, clave en la lucha contra el cambio climático
¿Crees que el cambio climático afecta a la construcción? Sí, así es. Que nuestro planeta está sufriendo las consecuencias del calentamiento global es un hecho científicamente comprobado. Por lo que ha llegado el momento de considerar el cambio climático también en el sector de la edificación, no sólo como cumplimiento de las políticas globales, sino como modelos de negocio de futuro y de contribución al cuidado medioambiental.
Así pues, apostar por la arquitectura sostenible basada en la eficiencia energética y en la rehabilitación inteligente de viviendas y empresas, es clave para garantizar una mejor calidad de vida para las futuras generaciones y para ayudar al mismo tiempo a proteger la biodiversidad.
En este sentido, uno de los estándares que cumplen con los requisitos de la construcción sostenible o bioconstrucción es la Certificación LEED, la cual evalúa el acabado de una construcción según los criterios de sostenibilidad, eficiencia en el aprovechamiento del agua, energía e impacto atmosférico, materiales y recursos empleados, calidad del ambiente interior e innovación y proceso de diseño.
Pero, ¿cuáles son las ventajas de la construcción sostenible?
- El beneficio más inmediato de la edificación sostenible es la reducción del consumo de energía. Un edificio ecológico consume un 30% menos de energía que uno convencional.
- Respeta el medioambiente, ya que al usar menos energía genera menos CO2 y los materiales utilizados provienen de ejercicios de reutilización, lo que contribuye en menor medida al calentamiento global.
- Los costes de construcción de una empresa o casa ecológica son menores que los de otro tipo de edificación convencional, debido a una gestión más eficaz de los recursos.
- Asimismo, una construcción sostenible puede aumentar su valor de mercado, convirtiéndose en una herramienta fundamental de diferenciación y responsabilidad social corporativa.
En Magnovent, apoyamos el desarrollo de edificaciones con criterios sostenibles y de alta eficiencia energética desde la práctica del consumo inteligente en cada uno de nuestros procesos de trabajo, ofreciendo así soluciones respetuosas con el medio ambiente y con las propias necesidades de las instalaciones.